El proceso de actualización del modelo económico y social en Cuba ha favorecido el desarrollo de diversas formas productivas y de propiedad en el país. De esta diversidad se desprenden las cooperativas urbanas. Por tanto, es propósito de este artículo analizar la experiencia de Taxi Rutero 2, con la intención de mostrar la necesidad de rescatar la centralidad del trabajo y visibilizar las potencialidades de los significados del trabajo cooperado y solidario, como referente económico, político, social y ético.